Un día com hoy, pero 64 años atrás, el presidente de los Estados Unidos de América, Harry Truman, ordena bombardear las ciudades de Hiroshima y Naggasaki, hecho que puso final a la segunda guerra mundial y al mismo tiempo acabó con miles de vidas inocentes causandoles muerte por lesiones al momento de la explosión, envenenamiento por radiación y diferentes tipos de enfermedades degenerativas. El verdadero motivo, egoísta pero cierto, fue la disputa eterna por el poder político entre al URSS y EUA, y por si fuera poco, su impertinencia llega al extremo de justificarse argumentando que ambas ciudades no tenían importancia militar y que de cualquiera manera con bomba o no, la invasion a Japón resultaría con el mismo número de muertes que la bomba se llevó consigo. De este modo EUA se convirtió en el primer país en utilizar armas nucleares en una guerra.
Hoy, Hiroshima rememora el aniversario de la bomba atómica, en donde se dio acabo el homenaje a las miles de víctimas mortales del ataque, pidiendo se elaboren leyes a favor de la prohibición del uso de armas nucleares en la actualidad, intentando así, de evitar la brutalidad de los actos del hombre y las armas creadas por el humano para destruir a la humanidad misma.
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